viernes, 15 de abril de 2011

El niño que fuimos



José Saramago decía que hay que dejarse llevar de la mano por ese niño que fuimos, que sea él el que nos guíe, el que en ocasiones nos diga “no hagas esto o aquello”.


Y resulta que no nos dimos cuenta. Y mientras estábamos festejando el haber llegado a la luna, la invención del laser, el ci di, el refresco de cola invisible, el ay fon, y mil chacharas más, gente seguía muriendo de hambre, de insolación, de desamor, sintiéndose cada vez más lejos y ajenos del mundo. Y mientras pisábamos una duela finísima, alabando los acabados en caoba, los grandes espacios, la opulencia de un enorme jardín impecable, había un campesino preguntándose por que cada día llovía menos, deseando que llegara una lluvia, una al menos para al menos alimentar a su familia, ya no vender la cosecha, esa ya estaba jodida, pero al menos un maicito para sus hijos…


Y mientras reímos viendo televisión, festejando el gol de un chicharito que ni se inmuta de nuestra existencia, admirando lo que hacen aquellos a los que les llaman “estrellas” , hay gente que quisiera encontrar una banca decente para poder dormir hoy, que alguien pierda aunque sea veinte pesos y poder encontrarlos para llevar algo de comer a sus hijos aunque sea un pan dulce.


Y mientras vemos como suceden tantas cosas a nuestro alrededor y ser capaces de no hacer nada. Caer en la peor de las indiferencias. Me pregunto cómo es que somos capaces de ignorar lo que sucede. Ser capaces no solo de permitir, sino de fomentar que una persona gane millones de dólares por caminar unos cuantos metros con ropa prestada y que una persona que trabaja de sol a sol apenas y tenga para comer.


Estoy seguro que el niño que vive en mí no permitiría nada de esto. Y no es que el pudiera arreglar el mundo, pero al menos lo intentaría. Un “es imposible” no lo detendría.


Y no no es imposible cambiar. Si yo puedo cambiar y tender la mano a quien lo necesita, quiere decir que no es imposible. Es solo cuestión de que despertemos a nuestro niño interior para que nos diga que hacer.

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